Todas llevamos una pequeña princesa dentro.
Y no hay mejor sitio para sentirse princesa que un precioso castillo portugués, el de Santa Catarina, ahora reconvertido en hotel.
Tonos suaves -rosa palo y nudes-, tules, telas llenas de movimiento, volantes y zapatillas de bailarina. La nueva temporada nos va a convertir en bailarinas de ballet.
Cuando mi querida Rosa me enseñó este vestido inmediatamente pensé un modelo que había visto en la pasarela, de la mano de Valentino, para mí uno de los que mejor a llevado esta tendencia a la pasarela, interpretando a la perfección la elegancia que para mí significa esta disciplina.
En mis pies, mis bailarinas y no sabéis la maravillosa sensación de volver a tener unas "puntas" en los pies.
La diadema en forma de corona que da ese toque de princesa.
Y para el maquillaje, tonos rosas, dorados y topos para definir la mirada.
Feliz domingo.
Vestido / dress: Rosa
Bailarinas / ballet flats: stradivarius (sales)
Corona / crown: Zara (sales)
This is so inspiring! I love the post:)
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